George Inness, Sunset at Etretat, 1875.
«Cuando me pregunto por qué me he esforzado siempre en ser honrado, condescendiente e incluso bondadoso con los demás, y por qué no desistí al notar que esto sólo me acarreaba perjuicios y contradicciones, pues los otros son brutales e impredecibles, no tengo una respuesta».
Sigmund Freud.